Eliminación de subsidios y ventajas a privados. Una reversión de lo hecho bajo el mandato de Hugo Chávez. Una propuesta de la Jefatura de Planificación de Petróleos de Venezuela recomienda aplicar una reestructuración sobre la industria petrolera y disminuir el peso de la compañía estatal en los negocios del sector, de acuerdo con un documento al que tuvo acceso Efecto Cocuyo.
El documento, con fecha de marzo de 2020 y encargado a una comisión designada por Nicolás Maduro, busca incentivar inversiones de empresas privadas en una industria que, según se lee en la propuesta, “dejó de ser estratégica para el mundo en vista de la existencia de nuevos productores y la decadencia de la producción nacional”. Por esa razón, destacan como “necesario y urgente” la reestructuración de Pdvsa.
La propuesta se basa en la reorganización del sector de exploración, producción, transporte, almacenamiento, transformación y comercialización del petróleo de Pdvsa.
Para facilitar el proceso el comité recomienda la simplificación de la estructura a través de la eliminación de la participación de la estatal en negocios no petroleros, como los planes de servicios y apoyo social, e incluyendo sus participaciones en otras compañías de la región; mayores ventajas a los socios privados para que operen campos y refinerías por cuenta propia; y la eliminación de subsidios en el precios de los combustibles.
“Las actividades desde aguas arriba hasta aguas abajo, serán desarrolladas bajo cuatro modelos de negocios dependiendo de la sección de negocio. A saber, Empresas Mixtas, Contratos de Producción Compartida, Contratos de Servicios y Licencias. Conservando en todos la reserva de propiedad de los hidrocarburos para el Estado a través de Pdvsa”, señala el informe.
Estas recomendaciones surgen cuando la estatal ha perdido dos tercios de lo que producía hace 20 años. Según el último informe mensual del mes de marzo, publicado por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep), la extracción de crudo de Venezuela ronda los 700.000 barriles diarios.
Hace solo 24 horas se nombró a Tareck El Aissami como ministro de Petróleo y a Asdrúbal Chávez, primo del presidente fallecido Hugo Chávez, como jefe de la petrolera nacional por un período de interinato, según la Gaceta Oficial. Con ello se puso fin a la dirección del mayor general de la Guardia Nacional, Manuel Quevedo, quien estuvo al frente del sector desde noviembre de 2017.
Eliminación de subsidios
Las propuestas, en esencia, revierten las políticas petroleras llevadas a cabo por Chávez, quien nacionalizó campos petroleros, ordenó la creación de empresas mixtas con los socios privados y puso a Pdvsa por obligatoriedad como máximo accionista del sector, además de responsabilizarla de programas sociales y negocios no petroleros.
Sin embargo, tras años de desinversión y falta de mantenimiento en la industria, la producción se vino a pique y las refinerías colapsaron, lo cual ha desatado largos períodos de escasez de combustible en todo el país que han obligado a severos racionamientos, incluyendo la capital Caracas.
¿Qué ocurrirá con las filiales creadas por Chávez?
El comité recomienda a la estatal que ponga en disposición del Ministerio de Petróleo “las actividades que actualmente ejecuta en materia de servicios técnicos y apoyo social”, lo cual incluye a todas las empresas propiedad de Pdvsa que ejecutan planes no relacionados “con la gestión directa de producción de petróleo y gas”.
Todas ellas quedarán bajo responsabilidad de la administración pública o “irán a la venta, o liquidación y cierre”.
Entre esas compañías se encuentran Pdvsa Marina, Pdvsa Naval, Pdvsa Agrícola, Pdvsa Industrial, Empresa Nacional de Transporte, Pdvsa Gas Comunal y Pdvsa TV.
¿Habrá cambios en las empresas mixtas y en los campos operados por Pdvsa?
En la actualidad Pdvsa desarrolla sus actividades con una mayoría accionaria en 46 empresas mixtas y 34 unidades de producción operados exclusivamente por la estatal.
No obstante, con la reestructuración que se propone, la petrolera nacional reduciría su participación por proyectos desde 60% actual hasta 50,01%, lo mínimo fijado en la ley, y los campos y áreas manejados completamente por la estatal se convertirían en empresas mixtas.
“Esta acción consistirá en someter a consideración de los acreedores la posibilidad de convertir la deuda en activos y honrar los compromisos de capital e interés adquiridos por Pdvsa. Aquí la explotación de los campos seria 100% realizada y soportada por la empresa seleccionada, la cual levantaría los recursos de inversión requeridos para la explotación de los campos”, detalla el documento.
¿Cuál es el plan para las refinerías?
Se intentará captar nuevas inversiones a través del otorgamiento de licencias por parte del Ministerio de Petróleo a empresas públicas o privadas. Éstas podrán ser compartidas entre el Estado y las entidades privadas, o trabajarse por separado, con plazos de hasta 25 años con una extensión máxima de 15 años más.
“El Estado debe desmontar el subsidio sobre los combustibles consumidos en el mercado local, fijando precio internacional a detal de los mismos, una tasa de cambio regida por el BCV y un tabulador donde se especifique el porcentaje de subsidio mes a mes”, especifica el comité.
Asimismo, reconocen que la actual política de subsidios le genera al país pérdidas anuales de 11.000 millones de dólares, “que no le permite recuperar costos ni traducir las ganancias en obras tangibles y beneficiosas para el país, siendo totalmente desigual, poco equitativo y generador de grandes distorsiones en la economía”.
Por ello plantea la eliminación de subsidios, especialmente a los combustibles en el mercado interno.