Una unidad de la petrolera venezolana PDVSA declaró el martes una emergencia marítima luego de que la naviera alemana Bernhard Schulte Shipmanagement (BSM) reveló planes para devolver 10 tanqueros debido a la falta de pago de la estatal, según un documento de la firma venezolana y fuentes.
BSM, operador de una parte de la flota de petroleros de PDVSA, confirmó el mes pasado que sus tripulaciones abandonarían los tanqueros Río Arauca y Parnaso, que están retenidos en Portugal por tarifas impagas por parte de PDVSA a un astillero y una autoridad portuaria.
Un tercer buque también operado por BSM, el Icaro, fue incautado en Curazao por un grupo de empresas navieras que reclamaban facturas impagas.