La Asamblea Nacional electa en 2015 decidió este viernes 30 de diciembre poner fin al gobierno interino, que desde 2019 estuvo a cargo de Juan Guaidó, con la aprobación por mayoría en segunda discusión de la reforma al Estatuto que Rige la Transición. Ese marco normativo, aprobado en septiembre de 2018, pretendía dar respuesta al vacío de poder en Venezuela al considerar fraudulenta la “reelección” de Nicolás Maduro.
El debate, que estaba fijado para la 1:00 pm comenzó con más de una hora de retraso. Con el quórum necesario, se dio inicio a la sesión extraordinaria a través de Zoom, que no estuvo exenta de las fallas de conectividad a Internet y un largo proceso para conocer la votación de un número importante de parlamentarios.
La propuesta, presentada por los partidos políticos Acción Democrática, Primero Justicia, Un Nuevo Tiempo y Movimiento por Venezuela, obtuvo 72 votos a favor, 29 en contra y 8 salvados.
Oposición “sensiblemente dividida”
Biagio Pilieri, coordinador nacional de Convergencia, consideró inconveniente modificar el Estatuto de la Transición y eliminar la presidencia encargada porque provocaría serias consecuencias tanto en el ámbito internacional como en el interno.
“El hecho presentaría ante el país a las fuerzas democráticas opositoras sensiblemente divididas. Eso es lo que está sucediendo. Y ni siquiera en torno al interés nacional, sino a intereses partidistas o particulares. Nada que atente contra la unidad será bien visto por los venezolanos que esperamos”, manifestó.
Pilieri lamentó que no se agotaran todas las posibilidades de un consenso. Y advirtió que estos desacuerdos pueden golpear sensiblemente la posibilidad de unas primarias exitosas para elegir el próximo año a un candidato unitario para las presidenciales de 2024 y así superar la tragedia que vive la inmensa mayoría de los venezolanos.
“Convergencia reitera su voluntad unitaria y la propuesta de agotar los esfuerzos. No puede ser que mientras nos sentemos en México, aquí no lo hagamos. Nada que pueda atentar contra el cambio, la unidad y la primarias presidenciales va a tener en Convergencia apoyo alguno”, manifestó.
“Una victoria para la dictadura”
José Prat, en representación de la Causa R, comunicó que la organización política no acompañaría, bajo ningún concepto, el proyecto de reforma del Estatuto para la Transición.
“No vamos a acompañar esto por considerarlo inconstitucional y, por supuesto, al negar el espíritu unitario con el que se elaboró el Estatuto original; el espíritu unitario que daba soporte institucional para que la comunidad internacional nos acompañará en esta lucha. Esta reforma va reñida con la Constitución, las leyes y la unidad”, expresó.
“Se le estará regalando a la dictadura una victoria y se le da a los lobbies internacionales de la dictadura la posibilidad de abrir las puertas al reconocimiento de Maduro y al desconocimiento de nuestra lucha. Por supuesto que es inconveniente. Es un grave error que podría obedecer a no sé qué intereses subalternos y bastardos que no son los intereses de los venezolanos”, añadió.
Prat señaló que otras de las razones es porque creen que se ponen en riesgo los intereses de la República y los activos que están resguardados en el exterior.
“Vestigio de la lucha democrática”
Richard Blanco, miembro de la Fracción 16 de Julio, ratificó —en representación de Alianza Bravo Pueblo, Gente Emergente y Vente Venezuela— el voto negativo a la reforma.